QQHH:.
Todos los años festejamos los solsticios de invierno y de verano, los mismos en los cuales inmortalizamos la gnosis de acercamiento y alejamiento del sol con respecto a la tierra, celebramos sus rayos que nos alcanzan e inundan de energía, analizamos la muerte y renovación de la naturaleza,…… hacemos fiestas y hablamos de recogimiento.
Pero cuál es el enseñanza masónica que podemos extraer de este fenómeno que viven las fuerzas universales… y naturales que nos rodean? Que tan seguido se dan estos fenómenos ? En nosotros como seres e individuos me refiero……. y no digo masones porque a lo que me voy a referir es a algo general del ser humano, y tenemos que concientizarnos de la masonería es una herramienta para ser mejores, una forma de vida y una oportunidad que recibimos para trabajar en un desarrollo continuo, que nos permite pasar por la vida, contribuyendo con un grano de arena, …. dejando una huella, con la esperanza en un mundo mejor para nuestros hijos ….
Pero ….como interpretaríamos los solsticios al interior de los HH:.? como podríamos establecer la relación con referencia a la falta o abundancia de frio o calor, oscuridad o luz, ……. y otros? Cuando hablamos de los solsticios, mi percepción es de qué hablamos de un acercamiento a nuestros anhelados sueños cual rayos renovadores del solsticio de verano, o a enfrentar posiblemente nuestras peores pesadillas mientras vemos caer las hojas producto de nuestras acciones cual época del solsticio de invierno, cuando nuestro accionar no ha sido de acuerdo a los dictados de nuestra conciencia,….. de la cual, sin embargo, dependiendo de nuestras reacciones a las vicisitudes de la vida, podremos hacer que nazcan rayos de luz que iluminen nuestra existencia y la de los que nos rodean …
Esta situación se nos presenta todos los días de nuestra vida cual solsticios de invierno y de verano, y que depende de nosotros y una conciencia iluminada que guie nuestros pasos…….. para que sea una constante la época en que las hojas caen y vemos sombras, el final de un sueño o camino…… o que se convierta en un campo verde lleno de posibilidades y con una tierra fértil lista para el nacimiento de nuestras más grandes ilusiones… y un sin número de caminos para la construcción de una menor sociedad….
Un masón se acerca al solsticio de verano, cuando empieza a cumplir con los designios que le han sido fundados y es esta la labor que en la masonería tenemos para con los HH:.
Permítame contarles una historia
“Había una vez, algún lugar que podría ser cualquier lugar, y en un tiempo que podría ser cualquier tiempo, un hermoso jardín, con manzanos, naranjos, perales y bellísimos rosales, todos ellos felices y satisfechos. Todo era alegría en el jardín, excepto por un árbol profundamente triste.
El pobre tenía un problema: No sabía quién era.
Lo que le faltaba era concentración, le decía el manzano:
– Si realmente lo intentas, podrás tener sabrosas manzanas. ¿Ves qué fácil es?
– No lo escuches, exigía el rosal, es más sencillo tener rosas y ¿Ves qué bellas son?. Y el árbol desesperado intentaba todo lo que le sugerían y, como no lograba ser como los demás, se sentía cada vez más frustrado.
Un día llegó hasta el jardín el búho, la más sabia de las aves, y al ver la desesperación del árbol, exclamó:
– No te preocupes, tu problema no es tan grave. Es el mismo de muchísimos seres sobre la tierra. Yo te daré la solución: no dediques tu vida a ser como los demás quieran que seas… sé tú mismo, conócete y, para lograrlo, escucha tu voz interior.
– Y dicho esto, el búho desapareció.
– ¿Mi voz interior…? ¿Ser yo mismo…? ¿Conocerme…? , se preguntaba el árbol desesperado, cuando, de pronto, comprendió…
Y cerrando los ojos y los oídos, abrió el corazón, y por fin pudo escuchar su voz interior diciéndole:
Tú jamás darás manzanas porque no eres un manzano, ni florecerás cada primavera porque no eres un rosal. Eres un roble y tu destino es crecer grande y majestuoso, dar cobijo a las aves, sombra a los viajeros, belleza al paisaje… Tienes una misión: cúmplela.
Y el árbol se sintió fuerte y seguro de sí mismo y se dispuso a ser todo aquello para lo cual estaba destinado.
Así, pronto llenó su espacio y fue admirado y respetado por todos. Y sólo entonces el jardín fue completamente feliz.
Yo me pregunto al ver a mi alrededor…
– ¿Cuántos serán robles que no se permiten a sí mismos crecer? Concentrandose en en lo que hacen otros y no en lo que pueden hacer
– ¿Cuántos serán rosales que, por miedo al reto, sólo dan espinas? Destruyendo en lugar de construir?
– ¿Cuántos naranjos que no saben florecer? Por no dedicarle esfuerzo al verdadero aprendizaje de las enseñanzas que nos da la masonería?
En la vida, todos tenemos un destino que cumplir, un espacio que llenar…
Venimos a aprender y encontrar nuestro camino con la ayuda de nuestros HH:. pero es en nuestro interior que finalmente tenemos que encontrar nuestras respuestas.
Cuando pienso en este tema, recuerdo cuando nació mi tercer hijo,…. Mi esposa siempre gusto de elaborar personalmente algún recuerdo para las personas que nos visitaban en los días posteriores al nacimiento. Esos recuerdos los acompañábamos de un pensamiento, uno de los cuales me quedo grabado y que decía: “Un hijo no es un jarrón que hay que llenar, sino un fuego que hay que encender…”, el mismo que en masonería sería: “Un H:. Mason no es un jarrón que hay que llenar, sino un fuego que hay que encender, para que brille con luz propia…”
QQ:.HH:. todos y cada uno de nosotros tendremos en nuestro interior constantes veranos e inviernos consecuencia de nuestras acciones, como masones tenemos una labor que cumplir en este mundo, al igual que el roble en nuestra historia, …… y tenemos el DEBER de no esperar que otros enciendan el fuego de nuestro ser, sino buscar encender nosotros mismos en nuestro interior, esa chispa que nos permita iluminar con nuestras acciones mejores días para nuestra sociedad.
QQHH:. como el roble tenemos un destino, como masones, parte de el es buscar nuestro crecimiento, dando cobijo a la esperanza, sombra a los visitadores, y con la Fuerza, la Belleza y la Sabiduría, combatir la hipocresía, la ignorancia y la maldad…
Tenemos una misión QQHH: cumplámosla !!!
M:.M:. Ricardo J. Garcia P.