SEMBLANZA DE ZOILO FLORES APONTE

Jose Luis Alemán Garate
Past Master

Estamos, evidentemente, en un periodo de total obscuridad –al menos no hay datos documentados- hasta que el trabajo infatigable del Venerable Hermano Zoilo Flores Aponte diera sus primeros frutos en la fundación de logias en el Oriente de Bolivia bajo la Obediencia de la Gran Logia de Antiguos y Libres Masones del Perú.

El 16 de noviembre de 1862, varios masones bolivianos fundan en Tacna- Perú la Logia Constancia y Concordia Nº 561 bajo la jurisdicción de la Gran Logia Provincial de Escocia en Lima, dependiente de la Gran Logia de Antiguos, Libres y Aceptados masones de Escocia.

Zoilo Flores Aponte fue cónsul de Bolivia en la ciudad de Tacna, durante el gobierno del Presidente Mariano Melgarejo (28 de diciembre 1864-15 de enero de 1871), durante su estancia en esa ciudad peruana fue iniciado en la Logia Constancia y Concordia Nº 561 y Exaltado al Sublime Grado de Maestro Masón el 5 de marzo de 1870.

No se puede ignorar el gran aporte masónico de Zoilo Flores Aponte. Este patricio de la Masonería boliviana, abogado de profesión, fue nombrado Ministro Plenipotenciario de Bolivia en el Perú. Esta función pública asignada coincidiría con el comienzo de la Guerra del Pacifico teniendo enfrentados a Chile con Bolivia y Perú, desde 1879 hasta la batalla de el Alto de la Alianza del 26 de mayo de 1880. El conflicto continuaría entre Chile y Perú concluyendo con la ocupación de Lima en enero de 1881. En estas circunstancias el Gobierno de la Moneda, ordena la captura de Flores Aponte, que “es trasladado a un punto denominado Angol, sitio extremo en la tierra araucana”.

La inmensa tarea masónica de Flores Aponte sólo culminaría con la colocación de la piedra fundacional de la Augusta Orden en Bolivia. Por tales razones, no hay duda en denominarlo el Padre de la Masonería Boliviana, cuyo espíritu visionario afrontó con “insuperable valentía el odio irreflexivo de sus enemigos y poniendo en la tarea la fe de un iluminado”.

En los primeros meses de 1884, un grupo de masones solicitaron a la Gran Logia del Perú, la “creación” de una Logia en el Valle de La Paz con la denominación de Obreros del Porvenir. La solicitud fue atendida a través del Decreto del 31 de marzo del mismo año otorgándole número correlativo de 16 a la Logia Obreros del Porvenir.

El 11 de mayo la Gran Logia de Perú emite un Decreto concediendo la Carta Constitutiva a esta nueva logia asignándole el “Titulo distintivo de Obreros del Porvenir Nº 16”. El punto 3 del Decreto citado señala: “Remítase el Ritual de los tres grados, la Constitución y Leyes de la Gran Logia y las instrucciones para la regularidad de los trabajos”.

El 30 de noviembre de 1884 fue consagrado el templo y se realizó la instalación de la Oficialidad con autorización del Muy Respetable Hermano Antonio Arenas, Gran Maestro de la Gran Logia del Perú. El primer Venerable Maestro fue Julio Méndez quien luego presentaría renuncia y entregaría el gobierno de la logia al Venerable Hermano Zoilo Flores Aponte. En efecto, se instala como Venerable Maestro de la nueva Logia el 22 de diciembre de 1884.

La labor del precursor de la masonería boliviana continuaría bajo la arenga de “…en la bandera del porvenir no están inscritas las palabras miedo, egoísmo, tiranía de la razón, esclavitud del pensamiento que producen la ignorancia del alma y el envilecimiento del corazón.” Ese blasón seguiría iluminando su obra fundando logias en territorio boliviano, las que trabajarían con Ritual de la Gran Logia del Perú, a partir de 1885, siendo estas las siguientes:

Obreros del Porvenir N° 16, en el Valle de La Paz
Trabajo y Honradez Nº 17, en el Valle de Sucre.
Orden y Libertad Nº 18, en el Valle de Oruro
Iris de Paz Nº 19, en el Valle de La Paz
Estrella del Oriente Nº 26, en el Valle de La Paz
Fénix, en el Valle de Potosí
Logia (sin referencia al nombre) en el Valle de CoIquechaca