Una característica del Ritual de Emulación
El Ritual de Emulación se caracteriza por su tradición oral, donde la necesidad de practicar el Ritual de memoria constituye una característica esencial para mantener vivo el espíritu del Ritual.
Si bien es cierto que muchos críticos de Emulación consideran que hoy en día no se justifica memorizar el Ritual de la misma manera que sus inicios cuando su propósito estaba dado por evitar que los secretos de la logia fueran revelados.
El verdadero motivo que subyace en la actualidad, es la espiritualidad y profundidad del Ritual.
Muchos Hermanos han podido comprobar personalmente que; Cuando más profundizan en el ritual y memorizan sus ceremonias, más descubren lo hermoso de su conceptualización, aprendiendo a quererlo y respetarlo. Una simple frase o palabra puede revelar horizontes insospechados y brindar a cada hermano la merecida recompensa a su esfuerzo constante.
Los Hermanos iniciados en el Ritual de Emulación se caracterizan por un especial apego al conocimiento y dominio del ritual, toda vez que es allí donde se configura y visualiza el marco teórico y contenido práctico del trabajo de Piso de cada Tenida.
Podemos definir el Ritual como intimista, ya que es a través de la Práctica y el estudio del mismo que el Iniciado incorpora, siente, hace suyos y reflexiona sobre los muchos mensajes implícitos en las Ceremonias de Apertura y Cierre, los que se complementan y profundizan en los textos correspondientes a las Ceremonias de Iniciación, Pase y Elevación.
Se dice que el Ritual de Emulación entronca los usos y costumbres de los Antiguos que eran tradicionalistas y espirituales.
Los Hermanos que trabajan en este Ritual luchan por mantener estas tradiciones y la pureza del mismo. Un paso mal dado, un signo mal hecho, una palabra omitida o cambiada, golpes de más, golpes de menos, para un masón, deben ser siempre motivo de preocupación, puesto que la perfección en el manejo del ritual es lo que nos conecta a la parte y fuerza esotérica que pudiera tener la masonería. Podemos contemplar los ritos iniciáticos como expresiones más simples de la magia. Cada vez que entramos en un templo lo hacemos en un terreno consagrado, lo que exige todo nuestro respeto. De la misma manera, cuando nos constituimos en Logia y abrimos los trabajos, realizamos toda una serie de llamamos a las puertas de estamentos superiores.
Si abrimos mal o no llevamos adecuadamente a la práctica del ritual, quizá no consigamos alcanzar esos estamentos o espacios superiores, de la misma manera que no es posible abrir una caja fuerte si no se introduce adecuadamente la combinación.
(Extracto del Libro «El Trabajo de Emulación Explicado»)