Rosacruz son aquellos Iniciados en la mística expresión compuesta por La Rosa y la Cruz, no son pocos los que se arrogan ser depositarios de los antiguos misterios que hacen a esta expresión, nuestra Magna Orden ha creado un capitulo de Los Caballeros Rosacruz, que contiene una compleja composición simbólica, cuya alquimia tiene múltiples interpretaciones, con una mágica mística que penetra los sentidos, La Rosa y La Cruz.
Desde tiempos muy antiguos, mucho antes de Jesucristo, la cruz se utilizó como un símbolo solar. El hombre primitivo, en sus primeras manifestaciones al sol, lo miraba con los brazos abiertos, siendo esta la primera nota espiritual de la cruz, que es un símbolo representativo de las fuerzas masculinas de la naturaleza.
La rosa simboliza el ideal de belleza, delicadeza y hermosura. Representa a la mujer y al principio de fecundidad, a la madre naturaleza. La conjunción de ambos símbolos es el encuentro de dos fuerzas generadoras opuestas de la naturaleza. Es la suma del par de opuestos que originan la creación.
La Cruz ha sido usada por los cruzados sobre su manto blanco, como símbolo de la cristiandad y roja por la sangre derramada por Cristo. Se sabe que Los Templarios, con el consentimiento del Patriarca de Jerusalén, instituyeron un culto relacionado con los antiguos misterios iniciáticos, dándole el nombre de Rosa Cruz.
SOBRE EL USO DE DIOS.
Las Cruzadas, ocurridas en los siglos, XI, XII Y XIII han constituido el hecho internacional mas significativo de la Edad Media, han unido a reyes, nobles, caballeros, pobres e indigentes en la Europa de la época, bajo una misma bandera, la bandera de la religión cristiana, bajo el intenso lema de… “Por que Dios lo quiere” invocado por el pontífice de entonces, logrando en la turbulenta Europa la denominada Paz de Dios. Paz que duraría hasta el siglo XVI, cuando nuevamente se encienden las guerras internas en Europa, también en nombre de Dios, debido al cisma de la iglesia católica del año 1517, ocasionando múltiples guerras religiosas que duraría mas de cien años y terminarían con la firma de un tratado internacional, denominado como la paz de Westfalia, ocurrido en el año 1648, , en esta ocasión se reconfiguraron los reinos y naciones europeas en un contexto mas político y secular que religioso, perdiendo la iglesia católica su primacía política e internacional que ostentaba sobre los reinos.
CONTEXTO GENERAL PREVIO
Cuando el emperador Constantino, decide fundar en el año 324 Constantinopla, sobre lo que era la antigua ciudad de Bizancio, una colonia fundada por los griegos unos diez siglos antes para controlar el comercio del mar negro, y que luego se convertiría en la capital política del imperio romano, no se imagino que tal ciudad seria la guardiana de las posteriores acciones que el islam provocaría en los siglos venideros, en su afán de expandir su religión como efecto universal.
Con la fundación de Constantinopla, se crean dos vertientes de atención y de poder del imperio Romano, la occidental con Roma como capital y la oriental con Constantinopla como centro político del imperio romano. El año 476 con la toma de Roma y la caída del imperio de occidente ante las tribus germanas, emerge Constantinopla como El Imperio Bizantino o el imperio romano de oriente, resistiendo durante mil años en todas sus fronteras el acoso guerrero de los diferentes pueblos que trataron de tomarla, hasta que finalmente el Imperio Otomano la toma el año 1453, fecha que se considera como el fin de la edad media y fecha a partir de la cual el gran imperio Otomano intenta la invasión de toda Europa, intento que es frustrado definitivamente con el fin de la primera guerra mundial, liberando a Grecia de su yugo. Desde aquella primera cruzada la lucha del Islam contra el occidente sigue teniendo el sello de los infieles cruzados, termino actual referido a todo el occidente.
LA PRIMERA CRUZADA
Las cruzadas fueron nueve y se desarrollaron entre los años 1095 y 1291, terminaron con la toma del Acre por los musulmanes y la expulsión de la cristiandad del cercano y del medio oriente.
Desde el nacimiento del Islam, el imperio Bizantino se vio permanentemente acosado, aunque al inicio con los musulmanes de origen Árabe, establecieron una paz comercial que permitió una convivencia de tolerancia religiosa mutua, siendo Jerusalén y Siria crisoles de comercio, nacionalidades y religión. Sin embargo con la conversión al Islam de los Turcos Selyùcidas y la toma de la península de Anatolia, hoy Turquía, se corto la vía terrestre de peregrinación a los santos lugares de la cristiandad, los peregrinos eran permanentemente atacados, robados y hasta asesinados por los Turcos, esta situación, será el detonante para organizar la primera cruzada.
Ante tal situación del pueblo cristiano y el peligro Para el Imperio Bizantino, el emperador de Bizancio, Alejo Comneno, escribió una carta al papa Urbano II, pidiéndole ayuda militar para defender las fronteras del Imperio. La Iglesia Católica romana de occidente, vio en ese pedido la oportunidad de alcanzar influencias en Bizancio y procurar el sueño Católico de reunificación con la Iglesia Ortodoxa de Oriente, perdido desde el año 1054.
Bajo este escenario político religioso, el Papa Urbano II, en el año del Señor de 1095, convoca al concilio de Clermont, para pedir a los reyes y nobles de Europa que organicen una expedición militar para liberar los Santos Lugares de la religión cristiana del dominio musulmán. Al grito de porque “Dios lo quiere” cientos de nobles de pequeño y mediano rango obedecerán el mandato de la Iglesia y se dispondrán a liberar Tierra Santa “a sangre y fuego; con la promesa de la Iglesia de que en su ausencia sus títulos y tierras serían respetados y que al convertirse en “Soldados de Cristo” y participar en la expedición sus pecados les serían perdonados.
Mientras los ejércitos de nobles se preparaban, se formaron paralelamente expediciones de caballeros pobres y campesinos que partieron apresuradamente hacia Tierra Santa ese mismo año de 1095, totalmente desorganizados, estas expediciones se conocerán como “La cruzada de los pobres”. Estas hordas arrasaron los territorios a su paso. Una vez en Bizancio, cruzaron el estrecho del Bósforo con la colaboración de la marina Bizantina, llegaron hasta Asia y consiguieron derrotar en un principio a los turcos, pero fueron posteriormente masacrados.
En el año 1096 los grandes ejércitos de los nobles partieron hacia Tierra Santa, conformados en su mayoría por franceses de todos sus territorios, a los que se unirían pequeños grupos de nobles alemanes, italianos y españoles. Cada ejército acataba las órdenes de su señor, pero todos acataban el mando único de Adhemar, obispo de Le Puy, en Francia.
Tras seguir diferentes rutas marítimas y terrestres los ejércitos de cruzados, llamados así por que solían llevar una cruz de tela blanca cosida a sus ropas, llegaron a Constantinopla en el año 1097. Tras el juramento de lealtad al Emperador Bizantino, los ejércitos cruzados, atravesaron el Bósforo hasta Anatolia, donde se enfrentaron a los turcos, venciéndoles en Nicea y Dorilea, ciudades que devolvieron de mala gana al Emperador Bizantino.
Tras estas victorias se dirigieron a Antioquía y Edesa, fundando en esta última el primer estado cristiano en la región, luego el 1098 tomaron Antioquia, fundando el principado de Antioquia, expulsando inclusive a los Bizantinos y rompiendo su juramento al emperador Bizantino. En Antioquía ocurre la muerte del obispo Adhemar, el único hombre capaz de unir bajo su mando a los distintos ejércitos cristianos.
Tras Antioquía el siguiente destino era Jerusalén, ciudad santa para cristianos, judíos y musulmanes. Tras un duro asedio tomaron la ciudad el 15 de Julio de 1099. Al entrar en la ciudad los cristianos cometieron una de las mayores matanzas de la historia, atacando ferozmente no solo a los musulmanes, sino también a los judíos a quienes responsabilizaban por la muerte de Jesucristo. Cuando no hubo más musulmanes que matar, los jefes del ejército se dirigieron en procesión a la Iglesia del Santo Sepulcro para la ceremonia de acción de gracias”. Se dice que cerca de 40.000 personas fueron asesinadas de mil formas diferentes, en una autentica orgía de sangre y destrucción. Todo en nombre de Dios y con el perdón de los pecados, concepto impuesto por los hombres del clero, no por la doctrina de Cristo.
La actuación de los cruzados dejó conmocionado al mundo musulmán, este actuar engendró un enorme odio entre ambas religiones, y creo heridas que aún hoy en día no se han cerrado.. Al fragor de las cruzadas surgió también el contacto entre dos mundos aislados, dos civilizaciones diferentes, Oriente y Occidente, un contacto que serviría para intercambiar las culturas de ambos mundos y para desarrollar el comercio y la riqueza de la que gozaron también la Orden de los Templarios, formados después de la primera cruzada.
Las siguientes cruzadas tuvieron el toque exclusivo de la realeza Europea y fueron estratégicamente guiadas por Los Templarios, como orden religiosa-militar, La Orden del Temple, fue creada ante el rey Jerusalén el año 1118 por nueve caballeros franceses, asignándoles como cuartel general al área que ocupaba el antiguo Templo de Salomón. Los Templarios usaron la cruz roja sobre su manto blanco, símbolo de la cristiandad y roja por la sangre derramada por Cristo, perduraron hasta el fin de las cruzadas, quedando como un ejercito libre y casi autónomo, replegándose en parte a su cuartel general en las afueras de Paris, constituyéndose en un poderoso y rico estado, dentro de otro estado, hecho que provoco el celo y la ambición del rey de Francia, Felipe IV, quien presiono al Papa Clemente V, para que disolviera la Orden, usando para este propósito diversas acusaciones de herejía, juicio que duro siete años concluyendo con la muerte en la hoguera del Gran Maestro de la Orden Jacques de Molay, en Marzo del año 1314, frente a la catedral de Paris. Cuenta la leyenda que 24 carabelas templarías, a la media noche, escaparon de Francia por el puerto de La Rochel, hacia Escocia, llevando a los monjes guerreros y algunas riquezas y que fueron muy bien recibidos y protegidos en las tierras escocesas, donde sus conocimientos fueron apreciados y conservados, constituyéndose esta leyenda en una vertiente de los orígenes caballerescos de la Francmasonería.
Cochabamba, 30 de Agosto de 2019
C:.R:.C:. OSCAR ANGEL MAJLUF COVARRUBIAS
BIBLIOGRAFIA
Liturgia del Grado XVIII, Caballero Rosa Cruz, Año 2008
Cruzadas, Thomas F Madden, Ed. Lumen, Buenos Aires, año 2005
Los Templarios, Pastora Barahona, Ed. Libsa, Madrid, año 2006
El Imperio Romano, Isaac Asimov, Ed. Alianza, Madrid, España, año 2010.
Constantinopla, Isaac Asimov, Ed. Alianza, Madrid, año 2010