El elemental de este árbol, tiene terribles poderes ígneos que flamean.
Las puertas de los Templos Cósmicos están hechas con maderas de cedro.
El cedro está íntimamente relacionado con las abrasadoras llamas de nuestra Columna Espinal.
Los Devas que gobiernan a los elementales de los cedros de los bosques, tienen el poder de abrir la puerta incandescente de nuestro Canal de Sushumná.
Este canal es como un pasillo subterráneo con sus Treinta y Tres Cámaras abrasadoras de nuestra Médula Sagrada, donde chisporrotean las llamas entre el crepitar de este gran incendio universal.
La entrada a este pasillo incandescente está íntimamente relacionada con la vida de los cedros del bosque.
Nosotros aconsejamos a nuestros discípulos, que se acuesten sobre tablones de cedro.
La Columna Espinal debe ser puesta en contacto desnudo con madre de cedro.
El elemental de este árbol esta envuelto en blanca túnica y blanco manto.
El elemental del cedro tiene el poder de hacernos invisibles ante nuestros enemigos.
El elemental de este árbol nos permite profetizar acontecimientos para el futuro.
Los cedros del Líbano sirvieron para construir las puertas del Templo de Jerusalén.
Los jueves y viernes santos, los cedros de los bosques se comunican entre sí por lúgubres sonidos, que resuenan en los ámbitos solitarios de las montañas.
Los cedros de los Patriarcas están hechos de cedro.
Meditando en el cedro, se descorre ante nuestra vista interna todo el panorama de las cosas futuras, y entonces podemos profetizar.
Rogando al elemental del cedro que nos haga invisibles, él concede nuestra petición, y así quedamos invisibles ante la vista de nuestros enemigos.
El orificio inferior de nuestra Médula Espinal, es la puerta de nuestro horno ardiente.
El guardián de esa puerta, es el Angel que gobierna a todos los elementales de los cedros.
Todas las puertas de los Templos están hechas con madera de Cedro. «Oh Líbano, abre tus puertas, y queme fuego tus cedros» (Vers. 1. Cap. 11: Zacarías).
Por ello es que la puerta de entrada al Canal de Sushumná, está gobernada por el ángel regente de los elementales de los cedros de los bosques.