CONSTRUYENDO…
El Constructor
EL HOMBRE EN SU LABERINTO
En anteriores artículos, habíamos abordado con la profundidad necesaria para el caso, los temas referentes a las virtudes y más recientemente a las religiones y los antivalores. El interés para estos tratamientos era analizar cuanto influían hoy en día en las conductas en las sociedades, toda vez que virtudes, valores, principios y buenos hábitos, habían estado presentes en todas las épocas de la humanidad, en tanto conducta, enseñanza y formación social y personal, como religiosa. Además, en las actuales circunstancias en la que los temas específicamente mencionados o en los generalmente considerados como el bien y el mal, son sujeto de tratamiento literario, filosófico e inclusive científico. Aún mas y para redundar, la historia que es experiencia de vida de la humanidad, en la narrativa e interpretación que la caracteriza, describe en el recuento e interpreta los hechos sucedidos antaño, las causas de los mismos, las motivaciones de los actores y sobretodo los efectos y resultados. El final de esos recuentos muestra catástrofes y calamidades humanas, como las guerras internas e internacionales, el sometimiento humano a determinadas políticas e ideologías totalitarias, la discriminación, etc.
La humanidad en su gran componente, ante esos resultados se pregunta la razón, por la cual el hombre actúa erráticamente, pese a la experiencia histórica y a los medios que dispone para distinguir el bien del mal. Instituciones de diverso orden y motivación, sean espirituales como las religiosas; científicas como las universidades, instituciones de salud, educación, ecológicas, etc.; políticas como organismos internacionales regionales NN.UU. OEA, UE, Derechos Humanos. etc.; y muchas más, alertan, previenen, auguran, advierten efectos desastrosos contra la humanidad si determinadas conductas, actitudes y acciones del hombre continúan.
Más atroz todavía, cuando hay líderes mundiales, que pese a que en sus respectivos países aún hay pobreza extrema, ignorancia y analfabetismo, hambre, problemas raciales y de integración, epidemias y endemias, etc. pero sin embargo desarrollan armas letales de ataque y defensa; con tanta vanagloria cuanto más mortíferas son. Estos casos tienen gigantesca desconsideración y desprecio por el género humano. Si tienen contradicciones con alguien en particular, su ataque contra ese será de magnitud tal, que afectara a quienes no tienen nada que ver con sus pasiones e intereses pero serán víctimas del holocausto. Habrase visto semejante irresponsabilidad, desprecio y desconsideración.
Hay otros casos que el uso y abuso del poder para la imposición de una determinada ideología y beneficiarse personal o grupalmente de la misma, los seduce de tal forma, que por la búsqueda o retención del mismo recurren a cualquier medio así sea ilegal. ‖El fin justifica los medios‖ es su razón, pero también la muestra de la inmoralidad que los domina.
Sucede todo esto, cuando, como nunca, la humanidad ha tenido avances espectaculares en la ciencia y tecnología. Con los descubrimientos, la búsqueda de la verdad eterna, ha dado saltos adelante más que pasos; las religiones más que antes practican el ecumenismo y encuentran nuevas coincidencias; la arqueología descubre nuevos indicios de la aparición de vida en el planeta y la sociología revisa postulados anteriores que refrescan el desarrollo humano. Nos acercamos más claramente a la verdad.
Hay instituciones cuya preocupación e interés principalmente es el hombre y su desarrollo. Entre las varias mencionemos a la Masonería. La Orden siente orgullo sano y justo por la acción de sus componentes en el pasado, para desterrar el absolutismo monárquico aunque sea por medios violentos cuando la razón no pudo convencer de su caducidad, injusticia e indignidad. Pero también siente el mismo orgullo cuando las mismas razones encontraron a monarcas que supieron entenderlas y cedieron a los cambios del absolutismo, evitando violencia y dolor a sus respectivas sociedades y pueblos.
De igual manera, el dominio monárquico absolutista colonial tuvo que ser derrotado con mayor o menor violencia, liderado por hermanos masones que encontraban gran incoherencia de este injusto y abusivo dominio, con los principios de Libertad, Igualdad y Fraternidad. Bajo esta triada, nuevas naciones fueron fundadas y entre los fundadores se contaban a verdaderos líderes masones y hombres de ciencia.
En los tiempos de injusticia, abusos, crisis sociales, se hicieron presentes los masones con la formación de la Orden en sus espíritus y mentes y coadyuvaron, cuando no dirigieron, los cambios que superaron los diferentes estados de situación. La formación integral, espiritual, social, intelectual que disponían, fue la fortaleza de los planteamientos que formularon en su tiempo.
No solo los religiosos abogaban y recurrían al estudio y profundiziaciones de los buenos hábitos, principios, valores y virtudes adoptados en las sociedades y practicado por los ciudadanos. Tampoco eran autoridades políticas, ni afortunados empresarios. Eran personas comunes y corrientes, que tenían conciencia de justicia, libertad, servicio y fraternidad, las que mediante el ejemplo, la educación y sobretodo el servicio mostraban el camino del bien y demostraban el del mal. Progresivamente fueron sustituyendo y erradicando las prácticas erróneas que sometían a la conducta ciudadana. En la actualidad hay países que cierran y clausuran cárceles por la falta de delincuentes. Tal situación se da en los nórdicos.
Veamos algunos males que aquejan a la humanidad.
1. Robar y Matar. Primitivamente era una actividad usual de mantenimiento y conservación de la vida propia. La retaliación por estas acciones era consiguientemente esperada. El mal social que generaba estas actividades en la mente y conciencia de las victimas generaba actitudes agresivas, amenazantes, riesgosas creando inseguridad, inestabilidad y miedo dentro el conjunto humano que en esas condiciones poco podían lograr. La comprensión de la justicia, la administración de la misma; y las penas y castigos superaron tanto la práctica del homicidio como de la apropiación de lo ajeno, desalentándolas como practicas normales y clasificándolas como delitos. El desarrollo humano generaba hombres más virtuosos, aunque no desaparecían los que pese a todo seguían en la actividad delictiva, con mejores recursos frutos del avance de la ciencia y tecnología, pero notoriamente inferiores en número.
2. Placeres y abuso. De la misma manera, el hombre concede mayor importancia al disfrute de los placeres y al uso abusivo de los bienes creados y a su disposición. El sexo, el poder, el dinero. En todas las épocas el abuso de estos placeres ha sido motivo de violencia humana y social.
2.1. Sexo. Una práctica tan natural, generadora de vida, pero sensual y muy sensitiva, ha provocado que el ser humano la considere cada vez más un deleite, un gozo carnal, un disfrute de los sentidos incurriendo en el exceso y llegando al abuso y a la violencia personal, social y moral. El amor entre dos seres es afecto, sentimiento, entrega, pensamiento, identificación, enamoramiento y en este último caso acompañado de la unión sexual.
Es pues un acto de vida sana y virtuosa, inicio de la unión familiar, con las dignidades y respetos que despiertan los sentimientos humanos, de acuerdo a las épocas de desarrollo del hombre.
Hasta aquí todo es comprensible y además plausible. Sin embargo, la actividad sexual, progresivamente ha excedido ese marco de acción virtuoso, para ser utilizado como goce carnal; sometimiento de género; uso de poder; botín de guerra; actividad económica; medio de generar riqueza; degenerando hasta el desprecio y la vileza en el accionar del hombre y también de la mujer.
Es comprensible que en los albores sociales de la humanidad, la actividad sexual era impulso e instinto, entre los géneros. El primitivo actuaba como los animales, bajo el instinto. Pero en la medida del desarrollo progresivo, el instinto ha cedido espacio a la mente naciente y sus sentimientos, inclinándose por la conformación de parejas afines, procreación de hijos con el sentido de pertenencia, protección y responsabilidad sobre estos.
Otra vez el desarrollo de la sociedad ha obrado en bien de la humanidad y ha analizado y distinguido el bien del mal. A este último lo ha clasificado en delitos y ha creado penas y culpas por las acciones de los actores.
La humanidad en este caso ha respondido favorablemente a sus propias autodefensas creadas, respetándolas mayormente, reduciendo así el peligro y riesgos y aumentando la seguridad personal y comunitaria.
Sin embargo en los tiempos recientes, la violencia sexual se ha incrementado en la mayor parte de la sociedad humana. Paradójicamente, el mayor desarrollo de la humanidad con la ciencia y tecnología revolucionando la esperanza de vida, se contrasta con el recrudecimiento de la actividad delincuencial sobre el tema de la sexualidad agravado por la intervención del alcoholismo, la drogadicción, el comercio humano y el tráfico de órganos.
Muchos países de los 5 continentes sufren el recrudecimiento de la actividad ilegal y violenta de la sexualidad, con los consiguientes efectos sociales, personales, morales en la sociedad, la familia, las instituciones y las personas en general sean infantes, niños, adolescentes, jóvenes, adultos, mayores, ancianos hombres y mujeres; padres, hijos y familiares; religiosos o laicos. El daño sicológico ocasionado a las víctimas es inmenso y generalmente imperecedero impactando a las víctimas, la familia y la sociedad. Es un verdadero endemoniado mal.
2.2. El Poder. Es el concepto sociológico de poder como sinónimo de capacidad, dominio, facultad de mandar sustentado por el sociólogo Max Weber. En su conceptualización del Poder apunta a la posibilidad que permite a un individuo de cumplir o imponer su propia voluntad ejerciendo dominio y autoridad y encontrando obediencia. En resumen poder es:
1. Capacidad de hacer o ser algo; 2. Capacidad de ejercer un dominio hegemónico sobre uno y/o varios individuos; 3. Habilidad de influir sobre uno y/o varios individuos; 4. Constituirse en la autoridad suprema reconocida. 5. Tener facultad de mandar.
Evidentemente el poder ha estado presente desde tiempos pretéritos en la humanidad y su conjunto organizado que es la sociedad. También ha sufrido cambios, transformándose hacia lo mejor. Del elemental ejercicio del poder basado en la fuerza bruta y ventajas naturales, hasta los conceptos actuales que se respaldan en la sociedad organizada política, jurídica, social y económicamente, pero definitivamente respetuosa de los derechos humanos de sus componentes, han transcurrido tiempo, conocimientos, experiencias, estudios, eventos, descubrimientos, etc. que explican las constantes superaciones que se han experimentado en la historia de la humanidad.
Ciertamente, el ejercicio del poder ha sido discrecional en sus inicios y causa de muchos abusos y excesos que han lastimado, ofendido y dañado a los actores. De la misma manera que en los anteriores temas, el desarrollo humano, ha marcado límites al poder y respeto a los inicialmente escasos y progresivamente más amplios derechos humanos.
La organización de la sociedad ha sido una medida de freno y límites a la actividad del poder. Cuanto más organizada y fortalecida esta, el poder es más controlado. Especialmente las acciones jurídica y social han determinado un campo de acción cada vez más concreto y controlado del poder en beneficio de la sociedad.
Aunque no se puede decir que en algún momento y sitio fue erradicado totalmente, el exceso del poder ampliamente ejercido ha sido grandemente controlado, aunque se debe reconocer que quedan ejemplos unos más dramáticos que otros en todas las sociedades para vergüenza de la humanidad.
En este caso las experiencias de guerras, holocaustos, racismos, discriminaciones, desigualdades económicas, regímenes de gobierno, ideologías, etc. y también el desarrollo científico han impactado en el ejercicio del poder reduciéndolo a uno aceptable y coherente.
Sin embargo en los últimos tiempos nuevamente se ha notado que la racionalidad del ejercicio del poder no tiene el anterior equilibrio. Los liderazgos parecen ignorar la historia del siglo XX y usan los adelantos científicos para la destrucción total del planeta. Una irresponsabilidad mayúscula.
2.3. El dinero. Nos basaremos en los conceptos técnicos de este bien. Dinero es todo bien generalmente aceptado por los agentes económicos, como medio de pago para sus intercambios y que además cumple las funciones de ser unidad de cuenta y depósito de valor. Algunos ejemplos de dinero son: las monedas y los billetes, las tarjetas de débito, y las transferencias electrónicas, entre otros.
Es a este bien al que nos referiremos en este subtitulo. Su nacimiento se explica por la necesidad de facilitar el intercambio de mercancías y de fraccionar las mismas. Su función de medio de cambio, creo valor en él. Con el tiempo quien disponía de la mayor cantidad de medios de cambio era más afortunado que los propietarios de los bienes necesitados sujetos a intercambio. Visto de este modo se convirtió en otra mercancía más y nació el interés por su atesoramiento. El ser humano en el tiempo de su desarrollo ha tenido la experiencia de valorizar cada vez más al dinero. Con él puede acceder a todo y por lo tanto su importancia es única y crece al ritmo del engrandecimiento de las necesidades cada vez más variadas de los hombres. La tenencia de éste, como medio de atesoramiento, da poder al hombre. Le proporciona acceso a satisfacer sus necesidades. Le da poder de dominio a otros hombres como el, productores de bienes de intercambio o simples consumidores. El poder que da el dinero es superior al poder de la sabiduría y de la ciencia. Se ha convertido en un supra poder capaz de doblegar a todo y a todos,… hasta la indignidad. Los análisis anteriores no pretenden ser catedra magistral sino una serena y humilde reflexión, sobre el estado de la humanidad que tiene espectaculares avances científicos y tecnológicos, pero una significativa desorientación hacia donde se dirige, con una pesada situación Masonería.
carga todos de tenemos males humanos, la palabra sociales, porque políticos, estamos económicos involucrados,…. inclusive esta la masonería